Las imágenes que vemos en pantallas, monitores, espejos, fotografías sólo reflejan la superficie de los seres y los objetos, e, inconscientemente, las calificamos. Esa obvia superficialidad se torna particularmente peligrosa si basamos nuestra vida en esas apariencias porque puede pasarnos que un día, sin saber, nos topemos con alguien que cuando nos mire nos absorba por los ojos y ya no podamos regresar, condenándonos a la desaparición.
Porque otro mundo es posible... "Estoy en los valles intentando recordar cada palabra, cada sonrisa, cada gesto cada mirada que me ayudó a aceptar cada una de las capas que me con-forma, cada sueño que llevo puesto. Estoy en las cimas intentando olvidar cada palabra, cada mueca, cada gesto cada mirada que me impidió avanzar cada comentario que me impidió asumir cada centímetro que llevo puesto . Y así divago, me debato, me ensimismo grito, sufro, callo, me encierro intento torpemente evadir tanto realismo soñando con el mundo que yo quiero ".
Comentarios